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Nuestra historia

Más de 175 años difundiendo la llama del Espíritu.

Pasado, presente y futuro

1835

Comienza un legado de servicio

Impulsado por el deseo de conocer a Dios y servir a los demás, San Antonio María Claret se ordenó sacerdote y viajó a pie por España predicando. Más tarde, como Arzobispo de Cuba, luchó por los derechos de los trabajadores, defendió el derecho al culto de los esclavizados e insistió en que las parejas interraciales pudieran casarse. Para él, la fe era acción.

1849

Fundada en el amor

San Antonio María Claret fundó los Hijos del Inmaculado Corazón de la Bienaventurada Virgen María en España. Conocidos como Misioneros Claretianos, nuestra congregación mundial de sacerdotes y hermanos responde a las necesidades más urgentes del pueblo de Dios, transformando comunidades a través de la fe y la acción.

1902

Una misión para los inmigrantes

Los primeros claretianos llegaron a los Estados Unidos para servir a los inmigrantes mexicanos en Texas, Arizona, Illinois y California, incluyendo la Misión de San Gabriel, donde todavía servimos hoy. Nuestras parroquias fueron fundamentales para las comunidades católicas de habla hispana, especialmente durante el tumulto de la Guerra Civil Mexicana. 



1924

Un lugar de acogida

A petición del cardenal George Mundelein, los claretianos abrieron la primera parroquia mexicana de Chicago para atender a los inmigrantes que trabajaban en las acerías. Lo que empezó siendo un antiguo cuartel del ejército fue reconstruido, ladrillo a ladrillo, hasta convertirse en la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, en el sur de Chicago. Sus más de 100 años de historia son testimonio del poder de la fe. 

1929

Esperanza en la dificultad

Ante la Gran Depresión, los claretianos establecieron el Santuario Nacional de San Judas dentro de la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe. Llamado así por el santo patrón de la esperanza y las causas imposibles, el Santuario ofrece una conexión más profunda con Dios a través de la devoción a San Judas. Hoy, más de tres millones de personas participan en esta comunidad de oración. 

1950

Canonizado en la alegría

San Antonio María Claret, nuestro fundador, fue canonizado por el Papa Pío XII. Para san Claret, la oración y la fe nunca fueron pasivas. Trabajó incansablemente para aliviar el sufrimiento de la gente. Su vida y su legado nos recuerdan que cada uno de nosotros tiene una vocación, un fuego en el corazón que espera ser encendido.

1951

En todo el mundo

Atendiendo a la llamada de apoyar a las comunidades internacionales, misioneros claretianos de EE.UU. partieron hacia Japón y Costa Rica para lanzar nuevas misiones. Siguieron otras misiones internacionales: Guatemala (1966), Nigeria (1973), Camerún (1986), Filipinas (1946) y Jamaica (2001).

1953

Expansión hacia el Norte

Después de la Segunda Guerra Mundial, dos sacerdotes claretianos establecieron una casa de misión inaugural en Quebec para servir a la comunidad católica francófona. Con el tiempo, nuestra presencia se extendió a más parroquias y diócesis, llegando a muchas más personas, incluidas las Primeras Naciones, inmigrantes, estudiantes y personas sin vivienda.

2014

Una provincia unificada

Se creó nuestra Provincia de EE.UU.-Canadá, uniendo nuestros esfuerzos y potenciando nuestro impacto. En la actualidad, nuestra provincia atiende a una diversidad de personas -incluidas las comunidades de habla española, francesa y vietnamita- y promueve la doctrina social católica a través de la defensa de las personas afectadas por la migración forzosa.

2024

Enardecidos por la misión

Nuestro Año Jubilar celebró 175 años de Misioneros Claretianos. Hoy servimos en 72 países y en 6 continentes, predicando la verdad de que todos son amados por Dios. Este Año Jubilar reenfocó nuestra energía, nos renovó en espíritu y encendió nuestro espíritu misionero para difundir el amor de Dios dondequiera que vayamos. 

2025

Legado impreso

U.S. Catholic, nuestra galardonada revista, celebró su 90 aniversario, habiendo sido publicada por primera vez como la Voz de San Judas en 1935. Jude en 1935, U.S. Catholic llega a más de un millón de lectores, explorando activamente las alegrías y los desafíos de vivir nuestra fe católica en el mundo de hoy.

2030

Construir el futuro

Nuestra congregación sigue creciendo, incluyendo hombres que estudian para ser Misioneros Claretianos aquí en la Provincia USA-Canadá. Proceden de diferentes países, con diferentes historias y diferentes áreas de estudio. Desde su discernimiento inicial hasta los votos finales, rezamos con ellos y por ellos. Únete a nosotros en la oración.